LA HISTORIA ES UN UNIVERSO ALTERNO TOMANDO EN CUENTA A LOS PERSONAJES DE RANMA , QUE LE PERTENECEN A RUMIKO TAKAHASHI
¡Hola! Aquí les traigo una nueva historia, con una temática diferente, espero que sea de su agrado.
Cabe mencionar que las personalidades de los personajes han variado al ser justamente una historia de universo alterno.
- Los personajes hablan: aaaa
- Cambio de escena: XxXxXxX
Disculpen si se me pasa algún error…
Sin más disfruten…
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"Dulces Pecados"
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Estamos en 1800.
Soy una novicia en este convento en la ciudad de Nagoya.
Desde muy chica tenía la vocación de convertirme en monja. Creo mucho en Dios y pues eso hizo que yo decidiera este camino para mí, además de que siento que servirle solo a él, es decir, a Dios, es algo que debo hacer en mi vida.
Siempre fui muy particular, por eso es que cuando cumplí los 13 años me tracé una meta y esa meta fue: convertirme en monja para servir a Dios y a mis demás hermanos.
Algunos de mis conocidos pensaban y piensan que siempre he sido una rara, mojigata y aburrida chica, quizá sí tengan razón, pero es que no me llama la atención nada de lo que les llamaba la atención a los demás jóvenes de mi edad. Aun así, no me importa lo que ellos piensen, pues debo hacer lo que yo quiero ser y quiero hacer.
Nunca he tenido novio o algo por el estilo, pues como bien dije, esas cosas nunca me llamaron la atención, además de que al ser tan… diferente… siempre sufrí de una especie de bullying. Pese a ello, nunca fue la gran cosa o bueno, así lo tomé yo.
Alguna vez me atrajo un chico, pero no pasó a mayores pues era completamente diferente a cómo pensé que era realmente.
Ahí comprendí el dicho, caras vemos, corazones no sabemos…
Creo que también no sirvo para eso de novios y tanta cosa, ya que me gusta mucho mi independencia, además de que ese chico que me gustaba, odiaba a Dios, lo digo en serio, pues una cosa es que bueno, respetes el gusto diferente de los demás y otra es muy diferente es que odie la persona que te agrade a alguien a quien tu ames haciendo cosas que te lastimen. Era algo que no podía tolerar, pues rebasó mis límites.
Siempre debe de haber respeto pese a las diferencias, es lo que debe primar. Eso era por un lado, además de que aparte de odiar prácticamente a Dios, me trataba tiempo después mal por ello siendo uno de los que me hacía bullying por un tiempo, hasta que felizmente se fue de la zona. Me dibujaba cruces de cabeza en mis cuadernos, dibujaba imágenes que al parecer eran el diablo, se burlaba y me molestaba de mí en demasía. Llegué a pensar que era el anticristo en persona, pues sus actitudes no eran normales.
Por otra parte, luego de eso, al darme cuenta de mi vocación religiosa, es que mi madre siempre me decía que hiciera lo que amo y ame lo que haga hasta que falleció hace cuatro años atrás.
Mi padre, no muy convencido aceptó mi decisión, pues él quería que conformara una familia como mis dos hermanas mayores, además de que era muy joven al tomar una decisión de tal calibre a esta edad pues al tener 16 años, ignoro a la fecha muchas cosas de la vida, cosas que en el convento nunca conoceré según él; sin embargo, y con apoyo de mis hermanas, mi padre me entendió y apoyó solo deseando mi felicidad, la cual la conseguiré aquí, de eso estoy segura. Además de que estando aquí, también conformaré una especie de familia. Eso le dije para tranquilizarlo en parte, bueno, es lo que considero de que es verdad, pues las hermanas de esta congregación que habitan este convento son muy agradables.
Y así es como terminé aquí en este convento, el cual es bastante acogedor y bonito, pues es muy grande, lleno de áreas verdes, tiene zonas para cultivar, lagunas y uno que otros animales de granja.
Desde que llegué, me hice amiga de dos novicias que ingresaron junto conmigo hace 6 meses atrás, sus nombres son Akari y Ukyo.
Ambas son muy bonitas, agradables y ambas con cabellos largos, aunque ahora ocultos por nuestra vestimenta, de ojos expresivos y vivaces. Realmente podrían estar haciendo su vida fuera de este lugar, pero si así lo decidieron, aunque Akari se vio de cierta forma obligada a hacerlo pues la querían casar a la fuerza con alguien mayor a ella, aun así me alegro de que lo hayan hecho, pues tuve la fortuna de poder conocerlas.
Yo a comparación de ellas, me siento muchas veces no tan agraciada, pero ellas siempre me dicen lo mismo que yo pienso de ellas. Yo siempre he tenido el cabello corto a la altura de mis orejas, ojos grandes color chocolate y soy más bajita que las dos.
Akari es hija de una familia muy influyente lejos de aquí, la cual tienen munchas granjas y la mayoría son de cerdos, motivo por el cual le encantan esos animales. Ella es muy agradable y siempre está con una sonrisa en la cara, bueno después de un mes en el que estuvo aquí comenzó a tenerla, pues antes paraba triste, ya que quisieron casarla con un señor mucho mayor que ella, por eso de mantener su dinero y esas cosas. Motivo por el cual a modo de huir de todo eso, es que se refugió en esta vida.
Ukyo, por otro lado, es un poco más seria que Akari, pero es una innata cocinera, pues desde muy joven al tener a su familia restaurantes es que aprendió y ahora sabe; sin embargo, ella quiso ingresar al convento pues tenía mañas algo no muy… buenas, como ser violenta con otras personas, tener pensamientos indecorosos con hombres y tocarse a solas. Ella misma se escandalizó y es que quiso buscar ayuda en Dios.
Debo aceptar que me dio cierta curiosidad en lo que respecta a esos pensamientos pecaminosos de Ukyo respecto a los hombres, pero luego regresando al camino sin alteraciones, es que obvié todo eso, bueno también ayudó a que fuera a confesarme con un sacerdote, pues son cosas que considero dignas de confesar, pues era algo que me dejaba un poco intranquila y al hablarlas con el padre, como que me ayudó bastante. Espero ya no ronden mi cabeza esas cosas nuevamente.
Ahora solo quiero ayudarlas a mis dos nuevas amigas.
Akari y Ukyo son mis compañeras de habitación, además de que hacemos los trabajos del convento juntas, como dar de comer a los animales, del sembrado y cosecha, en ocasiones las comidas, pues rotamos en grupos para ayudar a Mousse, el cocinero, algo en lo que no soy muy buena pero que según nos contaron, ahora alguien más será el ayudante, además de orar coincidentemente juntas casi todo el tiempo. Es bonito tener amistades así, pues más aun al ser algo que antes no tenía.
A la fecha, llevamos 6 meses siendo una novicia, por lo que nos faltan otros 6 meses más y así poder convertirme finalmente en una monja, algo que anhelo y sé que al lograrlo, alcanzaré mi felicidad, pues amo a Dios y sé que sirviéndole, lograré felicidad en todos los ámbitos de mi vida.
Estoy totalmente convencida de ello, como que le llamo Akane Tendo, seré finalmente una monja para servir.
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Soy Ranma Saotome, un chico rebelde y vándalo que vive en la calle conjuntamente con mis dos mejores amigos que se han vuelto mi familia, pues cuando era apenas un bebé, mis padres fallecieron, por lo que terminé en un orfanato.
En dicho orfanato, es que conocí a mis dos mejores amigos, Ryoga y Ryu, con los cuales al cumplir los 18 años, abandonamos el orfanato, pues ya no nos podíamos quedar más tiempo.
Siempre cuando nos quisieron adoptar a alguno de nosotros, los otros dos, intervenían haciendo que las personas o posibles adoptantes, se arrepintieran de hacerlo, aunque hubo dos oportunidades, en donde intentamos que nos adoptaran a los tres; sin embargo, nadie quería tres hijos, solo uno.
En fin...
Somos un grupo de tres algo rebelde, pues al no contar con un lugar digno para vivir y menos comida para comer, a veces terminamos robando cosas en los mercados y a la gente. No es algo de lo que me enorgullezca, pero es algo con lo que al menos nos ayuda a sobrevivir en este mundo.
Hace poco, exactamente hace un par de días atrás, conseguimos un trabajo digno, pues nos contrataron nada más y nada menos que en un convento, el convento de Nagoya.
Al comienzo nos sorprendió que nos aceptaran, pues teniendo en cuenta de que todas son mujeres y monjas es lo que causara que nos llamaran la atención, pero todo fue porque mi simpático amigo Ryu, se colocó barba, lo que causó que pensaran que era un hombre mayor y serio para el trabajo. A Ryu se le ocurrió la grandiosa idea de decir que también llevaría a sus ayudantes, pues somos un equipo, lo cual no es del todo mentira, pues eso somos.
Ahora Ryu es el ayudante de cocina junto con el cocinero del lugar.
Ryoga es el encargado de alimentar a los animales de granja del convento.
Y yo, pues bueno, yo me encargo de la limpieza del lugar, aunque junto con Ryu y Ryoga, nos encargaremos del sembrado y cosecha del huerto.
Como dicen, trabajo es trabajo y el trabajo dignifica a la persona, mañana recién empezaremos, pero ya sabemos cuáles son las tareas designadas y a trabajar para poder tener una mejor calidad de vida.
Por otro lado, nunca me han interesado las chicas, pese a que desde que estaba en el orfanato, siempre habían niñas a mi alrededor. Pienso que son una pérdida de tiempo, ya que cosas como el romanticismo y todas esas cursilerías, no ayudan, sino que entorpecen a uno.
Por lo que considero que son unas bobadas sin sentido, ya que nosotros solos podemos como lo hemos hecho desde casi siempre, siendo un equipo.
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Hoy es nuestro primer día de trabajo, me siento emocionado de alguna manera, pues al menos nos ayudará el dinero a poder vivir mejor y no acá debajo de este puente o de cualquier otro lugar, pues nos paramos mudando al ser perseguidos en ocasiones por las travesuras que hacemos por sobrevivir.
Ya acicalados, lo mejor que podemos y según nuestras posibilidades, nos colocamos barbas falsas y acudimos al convento.
Al llegar ingresamos y nos observan cautelosamente. Debemos comportarnos mayor y más serios de lo que somos.
Nos dejan pasa y la que viene a ser la madre superiora, nos da las instrucciones respecto a las zonas de trabajo, nuestro horario y hasta donde podemos ir a bañarnos durante la jornada de trabajo.
Trabajaremos de 7 de la mañana a 7 de la noche. Quizá sea una explotación, pero al menos nos darán comida mientras estemos aquí hasta la hora de salida.
Luego de las explicaciones correspondientes, ingreso a la iglesia del lugar con mis útiles de limpieza, como son baldes con agua, detergentes y trapos. Pese a ser un chico algo rebelde, creo en la religión, por lo que muestro mi respeto al ingresar.
Ya estoy en mis quehaceres, es cuando de pronto noto que alguien viene y justo estoy dentro de unos de los confesionarios limpiando.
Estoy por salir, cuando noto la presencia de alguien.
¡Ay no! Pienso.
- Padre… padre… - me llama al parecer una dulce y angelical voz.
¡Mierda!
¿Ahora qué hago?
Trago fuerte y duro la saliva.
- Sin… sin…. Ave María Purísima… - ¡Rayos! Casi meto la pata, felizmente me acordé lo que dicen normalmente los curas. Y digo engrosando la voz.
Noto detrás de esta especie de malla unos ojos grandes y brillantes, que desde donde estoy se ven bonitos.
- Sin pecado concebida… - me responde.
- Dime tus pecados… - ¡Mierda más parece una orden eso!
- Pues… nuevamente tuve esos pensamientos extraños respecto a los hombres…
- ¿En serio? - digo sin pensarlo, solo por curiosidad.
- Si… ¿Qué puedo hacer?Ya no quiero pensar en hombres…- me pregunta al parecer avergonzada.
- Pues… no pienses en esas cosas… emm… distráete…para… para que no pienses en esas cosas…
- Si ¿No? Gracias padre usted siempre sabe que decirme… nos vemos.
Y al parecer se retira.
¡Mierda!
Siento que estoy transpirando frío.
¡Me hice pasar por un sacerdote!
Aunque me dio curiosad poder saber más sobre sus pecados; sin embargo, ¡Qué rayos me pasa!
¡No debo tentar mi suerte!
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Ya siendo más tarde y luego de almorzar con mis amigos y con el cocinero. Ingreso a tomar un baño, pues estuvo algo fuerte el trabajo el día de hoy y eso que es el primer día.
Me quito la ropa e ingreso al ofuro que llené como pude.
Se siente tan relajante, pero debo apurarme, pues supuestamente no tomaría un baño.
Ya cuando estoy saliendo, tomo mi toalla y estoy por secarme cuando siento una presencia, pero algo tarde…
¡Mierda!
Abro mucho los ojos espantado.
Una monja ingresa al vuelo, se queda pasmada viéndome desnudo, para luego retirarse así de rápido como llegó, bueno después de haber gritado un estruendoso.
- ¡AHHHHH!
Luego de que se va, me visto rápidamente y me retiro, para luego fijarme de que me había equivocado de baño.
¡Doble mierda!
Espero que no me despidan en mi primer día de trabajo. O mejor dicho, no nos despidan.
¡Mierda!
¡Mierda!
Si pasara eso los chicos me trataran como pelota.
Solo espero un milagro.
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Después de confesarme, debo de admitir que el padre parecía algo... afónico y extraño.
Luego de eso y de hacer mis quehaceres, me alisto para poder ingresar al ofuro, estoy ingresando para poder tomarlo, aun vestida como siempre, pues nos desvestimos ya estando completamente dentro, cuando siento a alguien, quizá sea una de las hermanas. Ingreso rápidamente, cuando no veo a ninguna hermana, sino por el contrario a un hombre.
Me quedo pasmada y grito.
- ¡AHHHHH!
Y así como ingresé, salgo despavorida.
¡Felizmente no me había quitado nada!
¡Pero yo si vi a ese hombre desnudo!
Ahora que recuerdo, hoy en la mañana nos contaron que tres hombres ingresarían para hacer trabajos conjuntamente.
Debe ser uno de ellos.
Estoy pensando en ir a donde la madre superiora para contarle lo ocurrido, cuando una idea me invade.
¿Y si al contarle los despiden?
¿Debo contarle a la madre superiora?
¿Qué hago?
Creo que ya no le diré nada, pues se le notaba humilde.
Sí eso haré quizá solo por ser nuevo de equivocó de baño.
Sí, debe ser eso.
Iré al otro baño para luego poder ir a rezar e ir a dormir.
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Yo de nuevo… xD
Acá les traigo una nueva historia algo diferente y corta a la vez con nuestros personajes favoritos, como lo son Ranma y Akane.
¿Qué tal les pareció la nueva temática de este fic?
¿Cuáles serán esos dulces pecados? =O
Espero que les haya gustado este primer capítulo. =D
¿Qué más pasará?
Todo lo veremos en los siguientes capítulos…
Espero que me dejen sus reviews… no sean malitos xD es que quisiera saber qué tal le ha parecido…, además que me agrada mucho leerlos y me motiva a seguir escribiendo.
Sobre mis otros fics:
"Mi Número": acabo de subir un nuevo capítulo, es decir el cap XI. ¿Se acuerdan que este sería un capítulo de incendio? Pues vayan léanlo y descúbranlo xD que o es un incendio o una limonada caliente xD
Gracias por leer…
Cuídense mucho, sobre todo del Covid!
Saludos desde Perú!
=)