Aviso: Los derechos de H.P. no son míos, ni los libros, ni las películas ni los videojuegos, ni los cromos... esto esta hecho sin ánimo de lucro, etc...
- EL PRINCIPIO -
Lo primero que notó fueron las sabanas rodeando su cuerpo, suaves y calidas. Olían bien: No podía estar en su celda. Abrió los ojos y miró a su alrededor. Le costaba enfocar la vista, pero reconocía la disposición de los muebles, y el color naranja rabioso de las paredes… Estaba en su antigua habitación de la madriguera. Poco a poco su vista se fue aclarando. Todo estaba como siempre, las paredes naranjas, sus pósters de los Chudey Cannons, la vieja lámpara y sus muebles anticuados. Era como si no hubiera pasado el tiempo. Intentó incorporarse, pero tras unos segundos de esfuerzo, sus músculos se negaron a seguir obedeciendo y le dejaron caer sobre el colchón con un gruñido de dolor.
-¡Ron!- Hermione entró corriendo por la puerta y se sentó en la cama. Ron la miró sorprendido. Estaba… estaba estupenda, llevaba el pelo recogido en una coleta y tenia la nariz y las mejillas enrojecidas por el sol. Ella le miró con una enorme sonrisa y lagrimas en los ojos. – ¡Por fin has despertado!- Giró la cabeza hacia la puerta. –¡MOLLY, HARRY! ¡HA DESPERTADO, RON ESTA DESPIERTO!-
En pocos segundos su madre estaba abrazándolo y cubriendo de besos todo su rostro. –Mi pobre pequeño… Todo ha acabado. Ya estas en casa a salvo.-
-¡Mama, me estas asfixiando!-
-Lo siento cariño... que tonta soy, todavía estarás dolorido.- Se retiró un poco y le pasó la mano por el cabello, alisándoselo. –¡Merlín! ¡Después de tanto tiempo!... Tendrás hambre, después de tantos días inconsciente!... Te voy a preparar todas tus comidas favoritas… ¡Por Merlín, tengo que avisar a Arthur y a tus hermanos!- Se puso de pie secándose las lagrimas. -¡Esta noche hay una gran celebración!- Antes de irse le dio otro gran abrazo. -¡En seguida vuelvo!- Y salió de la habitación como un torbellino, camino de la chimenea.
Durante todo ese tiempo Harry había permanecido de pie al lado de la puerta. Hermione se volvió hacia él. –¿No vas a saludar a tu mejor amigo?-
Harry levantó la vista del suelo y lo miró tímidamente. –Yo… Lo siento.-
-¿Lo sientes? ¿Qué es lo que sientes?-
-¡Todo! ¡Todo es culpa mía! Por mi culpa estas cubierto de cicatrices, por mi culpa has estado a punto de morir más veces de las que puedo recordar... Y por mi culpa tuviste que sacrificarte. Por que no fui lo suficientemente fuerte para acabar con él… ¿Y como te lo pago?... Al final ni siquiera creí en ti… Hermione lo hizo y estuvo a tu lado, pero yo… Te he fallado totalmente.-
-Harry… Hermione estuvo conmigo por casualidad, y ella no creyó en mi… por lo menos, no al principio… ¡Si ni siquiera yo creía en mi!-
-Pero estaba ahí, y te ayudó… mientras yo me emborrachaba en Grimmauld Place sin mover un dedo.-
-¡Harry, nadie cree que tu…-
-¡No, Ron! Hermione te ayudó… Ginny te ayudó… ¡Incluso los gemelos te ayudaron!… ¿Y yo? Tu supuesto mejor amigo... ¡yo no hice absolutamente nada!-
-Harry, supongo que Hermione te lo habrá contado todo… ni siquiera nosotros sabíamos lo que había pasado… ¡o que estaba pasando!... ¡¿Como demonios lo ibas a saber tú?!-
-¡No hacia falta saber nada!… Yo era tu mejor amigo, tenía que haber confiado en ti… ¡no hacia falta ninguna razón!... George y Fred nunca las necesitaron, siempre creyeron en ti... pero yo…-
-¿Y no fallé yo a Hermione cuando creí que su gato se había comido a mi mascota?... ¿No te fallé a ti cuando pensé que habías puesto tu nombre en el Cáliz de Fuego?... Y me perdonasteis… Harry, todos cometemos errores.-
-¡Esto es distinto!-
-¡No, no lo es! ¡Es exactamente lo mismo!… Harry, sigues siendo mi mejor amigo… Y espero que yo también lo sea para ti.- Le tendió la mano. Harry la tomó inseguro pero Ron la apretó fuertemente entre sus dedos, mientras le miró a los ojos sonriendo. Harry respondió a la sonrisa mientras una lágrima se deslizaba por su mejilla.
-Supongo que querréis estar un rato a solas. Creo que Hermione te tiene que contar un montón de cosas… Yo… creo que voy a ayudar a Molly. Seguramente necesitara que alguien vaya a Hogwarts a recoger a Ginny… Ya sabes, para la fiesta de esta noche… y supongo que tendréis muchas cosas de las que hablar…- Según hablaba había ido retrocediendo hasta estar al lado de la puerta. -Bueno… hasta dentro de un rato.-
Hermione se quedó mirando con una sonrisa la puerta por donde acababa de desaparecer Harry.
-Estará bien. Quizás tarde un poco, pero estará bien.- Giró su mirada hacia Ron. –Bueno, supongo que querrás saber como has llegado hasta aquí.-
Ron miró a Hermione. –Si… La verdad es que no entiendo como me han podido soltar... ¿Por qué me han soltado, verdad? ¿Vosotros no habréis…?-
-¡No! Por supuesto que no… Después de la muerte de Dumbledore… ¿recuerdas lo que pasó, verdad?-
-Si… Estaba en el hospital… y murió… y a mi me capturaron...-
El gesto de Hermione se endureció. -¡Querrás decir que te entregaste! Lo sé todo… Harry me lo contó: la nota estaba escrita por ti. No creas que lo he olvidado, pero eso no importa ahora. Ya tendremos tiempo después, para hablar de esas cosas… ¿Recuerdas que Dumbledore nos dijo que solo podía darnos su muerte? En ese momento no lo entendimos pero ahora sé lo que quería decir… En su testamento, dejó unos documentos para ser entregados a ciertas personas en caso de su muerte. Uno de esos documentos era su diario. En él, explica todo lo que te hizo, como te convenció, y los hechizos y pociones que utilizó en ti. Al día siguiente de tu detención, Harry recibió una de las copias, junto con una nota de Dumbledore explicándolo todo.-
-Entonces… ¿Estoy libre?-
-En realidad…No exactamente.-
-¿No exactamente?... ¡Pues no estoy en Azkaban!-
-Bueno… en realidad… técnicamente… estas… podríamos decir que estas legalmente muerto. Moriste en el enfrentamiento con los Aurores que me liberaron… al menos oficialmente.-
-Pero… No lo entiendo. Si soy inocente. ¿Porque fingir mi muerte?...-
-Es un poco complicado de explicar… En el diario Dumbledore explica todo lo que hizo… y muchas cosas son… digamos… poco éticas. Pero el Ministerio cree que el mundo mágico necesita héroes, y Harry y Dumbledore son los salvadores del Mundo Mágico. Si de pronto se descubre todo lo que hizo el gran Dumbledore para ganar la guerra... Sería un escándalo gigantesco. Un escándalo que el Ministerio no esta dispuesto a aceptar en un momento tan delicado... Jamás dejaran que el diario de Dumbledore salga a la luz.-
-Y… ¿Y yo?-
-Nos ofrecieron un trato. Ronald Weasley murió en Azkaban pocos días después de su captura a causa de las heridas recibidas durante su enfrentamiento con los aurores. Tú ahora eres William Weasley, milagrosamente recuperado meses después de haber sido desahuciado por los sanadores. Siempre te has parecido mucho a él y nadie ha visto a Bill en mas de un año… es comprensible que este cambiado después de una experiencia así.-
-Pero yo no puedo suplantar a Bill… no sé nada de su trabajo, no conozco a sus amigos, ni…-
-Tienes amnesia… no recuerdas nada de tu pasado. Nadie se extrañará después de tantos meses en coma… con eso y un par de hechizos de glamour, nadie podrá sospechar nada.-
-¿Y Bill?... –
-Esta en el desván, tu madre lo ha reformado. Ahora es una habitación muy agradable. Solo la familia sabe que esta ahí.-
-Entonces… ¿Ahora soy Bill Weasley?-
-Sí… Todos creemos que es lo mejor… Siendo Ron, jamás podrías vivir tranquilo… Sin el diario serías un criminal y si saliese a la luz…-
-…Todo el mundo sabría lo que hizo Dumbledore… y lo que hice yo.-
-La gente no lo comprendería.. Así, eres un héroe… que pronto conquistara el corazón de la señorita Hermione Granger, amiga de la familia desde hace años y que amablemente se prestó para ayudar en la recuperación del joven.-
-Pero yo… todo lo que hice… no es justo… ¡Yo no soy ningún héroe!-
Hermione se sentó en su regazo. Ahora sus ojos estaban exactamente a la misma altura que los de Ron. Le sujetó la cabeza suavemente entre sus manos y le miró fijamente.
-Ron… En esta espantosa guerra, todos hemos hecho cosas horribles… Todos: Tú, yo, Harry... ¿Pero sabes una cosa?...La guerra ya acabó. Ahora solo es un trozo del pasado… Debemos dejarla atrás, intentar olvidarla y pensar en el futuro… Si no lo haces por ti, hazlo por tu familia… y por mi.-
-Hermione…- ¿Qué podía hacer?… Hermione tenía razón. La guerra era el pasado… Y lo más importante, ahora, eran ella, y Harry, y su familia. Después de todo lo que les había hecho pasar… No podía fallarles.
-Supongo que tienes razón… Como siempre. –Acercó su rostro y la besó suavemente en los labios. –De acuerdo, lo intentaré… pero solo por ti.-
-¡Genial!- Hermione lo abrazó fuertemente. Ron respondió a su abrazo. Tenía una mujer increíble que estaba loca por él. Y tenía toda una vida por delante… Sabía que no sería fácil… pero nadie ha dicho nunca que la vida fuese fácil…
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"I'm going to be a knight," said Ron. –Harry Potter y la Piedra Filosofal: Capítulo Dieciseis.
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Lamento muchísimo el enorme retraso de este último capítulo. Mi vida ha sido un pequeño caos (en realidad, mas bien grande) y no tenia energía suficiente como para ponerme a escribir… Menos mal que la cosa parece que ya se ha estabilizado lo suficiente como para poder volver a mis pequeñas aficiones... je,je…
Aunque este es el fin del este fic. tengo pensado sacar un epilogo de un solo capitulo… ya estoy trabajando en ello, así que no debería tardar en poder terminarlo… eso espero... Creo que ha quedado todo más o menos explicado, pero si algo de la trama se ha quedado 'colgando' intentaré aclararlo en este epilogo.
Gracias a todos lo que han dejado sus opiniones/criticas/etc… ¡Muchisimas gracias!
Como siempre las reviews serán bien recibidas… siempre que todavía quede alguien ahí… después de tanto tiempo… cualquiera sabe… TT