"The love in the time of cholera"

Aquí yo dando señales de vida después de mucho tiempo (?) u_u ¡me demore! Bueno mejor me callo, y aquí está el capítulo.-. :

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"…Del rojo al verde todo el amarillo muere

Belleza palidez insodables violetas

Se empezará a medianoche

Cuando se tiene el tiempo se tiene la libertad…"

¡¿Quién demonios era ese tipo? ¡¿Quién se creía para coquetearle a Su Amu? Sí, sentía algo por ella que no había sentido antes, sí, lo había aceptado al identificar su ira como "celos" nunca había estado celoso de nadie, y ahora pasaba esto.

Era un joven alto de cabellera negra, un tanto desarreglada y rebelde, con varios mechones los cuales caían sobre su rostro, sus ojos de un tono negro oscuro como la noche (1*), su nariz fina y delgada, sus labios finos y provocativos. La camisa que usaba era negra y tenía los primeros botones abiertos haciendo que se enmarcaba el bien formado torso que poseía, los pantalones de color blanco un poco pegados al cuerpo. En su mano izquierda tenía un par de anteojos que seguramente usaba para leer, en la derecha tenía un libro, puso uno de sus finos dedos para no perder la página en la cual se encontraba. Sonrío e hizo un comentario el cual hizo sonrojar a Amu, por la distancia que había Ikuto no pudo escuchar, con solo observar el rostro del peli azul se podía saber que no estaba para nada contento. Ver como aquel sujeto la hacía sonrojar, eso hizo que la sangre le hirviera de enojo, solo él, Ikuto Tsukiyomi, tenía derecho de hacer sonrojar a Amu, nadie más.

Una mano que tomo su hombro lo hizo reaccionar y dar la vuelta, era su amigo Kukai, le pidió explicaciones por aquel joven que coqueteaba con Amu pero al parecer este no sabía:

-No tengo idea de quien es…espera… ¿Estas celoso?

-Ese tipo no me agrada nada.-Evadió la pregunta.

Kukai sonrió divertido:

-Vamos a saludarlos.

-No lo creo-Dijo para después darle la espalda e irse.

-Sí, esta celoso-Comento más para sí mismo, para luego irse a conocer al nuevo "pretendiente" de Amu.

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"…Llora, llora y volvamos a llorar

Y bajo una luna llena

O bajo un cuarto creciente

Ah llora, llorar y volvamos a llorar

Hemos reído tanto bajo el sol…"

Ella estaba tan triste, sus primas se habían ido aquella mañana, las iba a extrañar tanto, pasaría mucho tiempo hasta que volviera a verlas, las risas, los buenos recuerdos, todo sería diferente en aquella casa sin sus familiares. Sorpresa, cuando Ikuto y Kukai habían traído a su padre, este estaba totalmente ebrio, y ella preocupada, aunque debía de admitir que ver a su padre en aquel estado había sido tan divertido. Aunque tenía muy presente que no lo volvería a ver ebrio, el ¿Por qué? Había sido su culpa por contarle que Ikuto y Kukai lo habían traído a casa, el muy orgulloso aún seguía sin que Ikuto le agradase en lo más mínimo, lo creía una persona inferior. Eso la hizo enojar tanto, pero ahora no sabía cómo lidiaría con su padre sin las bromas de sus tíos. ¡Se sentía tan frustrada!

Decidió salir de su casa por un momento quería relajarse un momento, tal vez vería a Kukai y a… En cuando pensó en el nombre se sonrojo, ¿Por qué se sonrojaba al pensar en él? ¿Por qué se sentía tan nerviosa con solo verlo, o con solo una mirada? Ahora si estaba confundida.

Paso cerca de unas jóvenes, delgadas morenas, con ojos claros, unas bellezas, las miro de reojo sin prestarles mucha atención, pero escucho su conversación "accidentalmente":

-¿Has notado lo extraño que esta Ikuto?

-Ni lo digas, últimamente no me ha dedicado ni una mirada.

-Al parecer alguna suertuda ya logro conquistarlo.

-¡Ni lo digas que me deprimo!

-Debe ser una mujer con clase, hermosa, atrevida…

Se alejó un tanto afectada por lo que acababa de escuchar, se sintió tonta por pensar que Ikuto sentía algo por ella, lo más seguro es que ya hubiera encontrado a alguien, probablemente una joven hermosa y divertida, alguien mucho mejor que ella.

Sin notarlo comenzó a llorar, había recibido un duro golpe para su autoestima y sus problemas en casa con la confusión que era su cabeza no ayudaba mucho que digamos, limpiaba las lágrimas delicadamente con sus dedos, pero estas seguían brotando de sus orbes sin que ella pudiera reprimirlo, decidió dejar de caminar antes de tropezar:

-¿Por qué lloras? ¿Son todas las lágrimas iguales?-Dijo una voz grave a su costado, cuando la escucho seco las pocas lagrimas que quedaban en sus ojos para observarlo, era un joven atractivo, usaba anteojos y tenía un libro en su mano derecha, parecía que estuviera leyendo y no hablándole a ella.

-Sabías ¿Qué las lágrimas son el lenguaje mudo del dolor?-Ahora si hablaba con ella.

-No, no lo sabía-Respondió con simpleza.

El solo levanto la vista, para observarla de pies a cabeza, se quitó los anteojos y sonrió encantadoramente:

-Con un rostro tan bonito, nunca deberías dejar de sonreír, nunca sabes quién se pueda enamorar de tu sonrisa-Después de decir esto, ella solo se sonrojo, pero luego callo en cuenta en algo.

-Gabriel García Marques-Menciono apenada. (2*)

-Muy cierto mademoiselle, pero igual te ves fea cuando lloras-Dijo para después mostrarle la lengua de manera infantil. (3*)

Ella le miro incrédula para después reírse un poco:

-Mi nombre es Kei Izumi-Sonrió

-Amu Hinamori.

-Un placer Amu-Dijo para después acercarse y depositar un beso en su mano.

Cuando ella estaba a punto de mencionar algo llego cierto castaño:

-¡Hola Amu!-Mencionó con su típico entusiasmo para después abrazarla.

-Hola Kukai.

-¿Quién es tu amigo?-Pregunto mirando a Kei.

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"…Te hayas en el jardín de una posada en las cercanías

Hay una rosa sobre la mesa te sientes feliz

Y en lugar de escribir observas tu cuento en prosa

La cetoína que duerme en el corazón de la rosa…"

Perfecto, tenía que llevar unos sobres a la residencia Izumi, que casualidad que hay viviera aquel sujeto:

-Disculpe traigo unos sobres para el señor Izumi-Hizo su mejor esfuerzo para contener las ganas que tenia de golpearlo, y asombrosamente lo logro.

-Él no está en estos momentos, me lo puede dar a mí-Le dijo sin mirarlo y leyendo un pequeño libro que tenía.

-Claro-Le entrego el sobre, cuando se daba la vuelta para retirarse del lugar él lo llamo.

-Deberías dejar de espiar a los demás cuando conversan-El peli azul solo lo miro confuso.

-¿Disculpa?

-Te vi esta mañana, lucias bastante enojado cuando estaba hablaba con esa joven-Se quitó los lentes y lo miro directamente a los ojos.

-…-

-Espera, te enojaste más cuando se sonrojo, tal vez estabas celoso. ¿Es tu pareja?

-…-Le miro de mala manera y comenzó a alejarse.

-No, no lo es. Deberías cuidarla, cualquiera te la quitara, si no tomas una decisión.

-¿Es una amenaza?

-Tómalo como quieras. Aunque se ve muy linda cuando se sonroja.

-Aléjate de ella-Le dijo enojado para después irse, tenía que alejarse de ese sujeto rápido, o si no, lo golpearía, eso era seguro. (4*)

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"…Has hecho dolorosos y felices viajes

Antes de descubrir la mentira y la edad

Has sufrido de amor a los veinte y a los treinta años

He vivido como un loco y he perdido mi tiempo

No te atreves a mirarte las manos y a cada momento

Quisieras estallar en sollozos…"

Luego de llegar a su casa, se dirigió a su habitación enojado aun, ese tipo podía ser tan molesto, amenazándolo, a él, se creía mucho. Abrió las ventanas y se recostó de modo que quedara mirando el techo. Comenzó a pensar ¿Por qué estaba tan enojado? No lo sabía pero honestamente, se sentía…mal, no quería que aquel sujeto le quitara a Amu, se enfermaba tan solo de imaginarlos besándose, desagradable, aquel sentimiento era simplemente detestable. Que las sonrisas de la peli rosa, las bromas, sus sonrojos, incluso sus insultos, eran algo que él no quería compartir con los demás, quería que ella solo le sonriera a él, que solo él pudiera hacerla sonrojar con su cercanía, solo para él; con aquel pensamiento egoísta se dio cuenta de algo, le gustaba Amu, la quería, y mucho.

Ahora todo tenía sentido, de cierta manera era relajante saber que ocurría con él, ahora la verdadera cuestión ¿Amu se sentiría de la misma manera?...

Sacudió la cabeza bruscamente, ¡No más pensamientos de mujer enamorada! (5*) Él era Ikuto Tsukiyomi, si ella no estaba enamorada, entonces pronto lo estaría, él haría lo posible para conseguirlo.

Pensó en eso detalladamente, comenzaría su "plan" ese mismo día, pero lamentablemente el sueño lo venció y rápidamente cayo en brazos de Morfeo con la sonrisa de la peli rosa como ultimó pensamiento.

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El frío recorrió todo su cuerpo dándole cierta sensación desagradable en todo el cuerpo, dio vueltas en busca de una frazada o algo para abrigarse, su esfuerzo fue en vano, miro al techo un tanto adormilado, todos los recuerdos de las últimas horas vinieron a su cabeza como si de una película se tratase, cuando llego al final de dicha película, fue cuando reacciono. Se paró de golpe, se había quedado dormido, ¿Qué hora era?

Miro la ventana, al parecer había oscurecido hace mucho, pasó su mano por sus cabellos tratando de aplacarlos, lo que al parecer dio resultado, salió de la residencia. Tomo una bocanada de aire, y se sintió bastante relajado.

Comenzó a caminar si un rumbo fijo, sin notarlo había llegado al frente de la casa de la peli rosa, en donde vio algo que lo enojo, era ese tipejo de hoy, ese tal Izumi, hablando como si nada con su Amu.

El peli negro tenía su brazo derecho descansando a su costado con un libro en su mano, su mano izquierda descansaba en uno de los bolsillos de su pantalón, sonreía con galantería, y ella tímidamente le correspondía la sonrisa, un tanto sonrojada.

Los celos lo cegaron totalmente, se acercó a ellos rápidamente, miro de mal modo al peli negro, luego miro a la oji ámbar y la tomo de la muñeca para llevársela consigo. Ella un no entendía nada, lo llamaba por su nombre, él parecía no responder, comenzaba a fatigarse al ser arrastrada por el peli azul y obligada a seguir su ritmo.

Después de correr alrededor de varios minutos, al parecer Ikuto comenzó a cansarse, así de decidió detenerse. Ambos fatigados, respiraban rápidamente en busca de aire, ambos apoyaron sus manos en sus rodillas debido al cansancio, sin embargo el peli azul no soltaba la delicada muñeca de ella, pareciera que hubieran soldado su mano a la joven:

-¿Qué…fue eso…?-Ella trato de preguntar con la respiración un tanto entrecortada.

El no le respondió, no podía creer lo que había hecho, se había dejado llevar por celos, y actuó de manera impulsiva, algo a lo cual él no estaba acostumbrado:

-Ikuto, te estoy hablando-Dijo para luego comenzar a erguirse.

-No lo sé-Respondió finalmente para luego levantarse y poner una se sus manos en su frente.

-¿No sabes?

-No lo sé, cuando te vi con ese idiota me enoje.

-¿No te agrada Kei?

Él la miro extrañado, le dijo que estaba celoso, y ella pregunta que si no le agrada el tipo ese. Apretó la mandíbula para aguantar las ganas de reírse:

-Claro que no, quiere quitarme a la persona que quiero-Después de decir esto, un sentimiento de tristeza inundo a la peli rosa.

-Ya veo- Se reprochaba internamente, realmente, había sido tonta al pensar que Ikuto la vería a ella de un "modo romántico" sin notarlo había comenzado a llorar.

-Amu ¿Estas bien?

-S-sí-Respondió en medio de un pequeño hipido que luchaba por salir de su garganta.

-¿Por qué lloras?-Se acercó a ella-preocupado- limpio una de sus lágrimas.

-¿eh? N-No no es nada, solo me di cuenta de algo-Una sonrisa forzada se dibujó en su rostro.

-No puedes decirme ¿verdad?-Preguntó un poco dolido.

-Lo que ocurre es que a veces nos damos cuenta que la persona que creemos corresponde a los sentimientos propios en realidad piensa en otra persona (6*)

-¿Cómo?

-Olvídalo, creo que estoy muy sentimental hoy-Dijo para luego comenzar a caminar con la intención de irse.

-Amu, espera-La tomo de la muñeca para evitar que se fuera.

-Déjame por favor, me parte el corazón que no me correspondas y tener que enfrentarte aquí.

-Espera, ¿estás diciendo que…?

-Sí, estoy enamorada de ti, pero sé que tu no sientes lo mismo por mí.

Ella lloraba, le rompía el corazón verla así, tomo su cara entre sus manos:

-Amu… yo también…estoy enamorado de… ti-La beso, ella abrió los ojos desmesuradamente, para luego dejarse llevar por el sentimiento. (7*)

Fue un simple rose de labios, dulce, transmitían todos sus sentimientos con ese inocente beso.

Se separaron, ella muy sonrojada evitando su mirada, él simplemente sonreía mientras un pequeño sonrojo poco visible se posaba en sus mejillas:

-Te quiero-Y la abrazo dulcemente.

-Y-yo igual-Logro responder.

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Sé que me demore, lo sé, no tengo perdón, asi que no más comentarios y a continuación mis pobres agradecimientos:

Kiray Himawari: Gracias! No sabes que feliz me ponen tus comentarios!

alice in funnyland: Gracias! Claro yo te presto mis libros n,n! gracias por dejar un comentario del primer cap.

Amu Uchiha Tsukiyomi: Ne ne Amiga Yaoista! Gracias por comentar, y gracias por creer en mí, ^^ .

SECRETO2112: Gracias por leer mi historia espero que el capitulo sea de tu agrado!

DezitaAlvarado: Gracias por leer mi fic, aquí la continuación esperando te guste.

Igual mis agradecimientos para las personas que no comentan pero igual se toman la molestia de leer.

(1*)Lo siento no pude evitar ponerlo xddd' para OnniiChan!

(2*)Si no se entendió esa parte es que, Kei le dice una frase de Gabriel García Marques "Nunca dejes de sonreír ni siquiera cuando estés triste, porque nunca sabes quién se puede enamorar de tu sonrisa" Claro Kei la cambia un poco, pero tiene el mismo efecto xdddddddddd'

(3*)¡La verdad lo ame! Aww! ¡Kei! ¡Querido invento de mi imaginación! (?)¡Lo ame! –w-

(4*)Casi mando su auto control al carajo xddddddddddd'!

(5*) De nuevo sin ánimo de ofender :P

(6*) Derechos de autor Oka-san.

(7*) Oka-san se terminaron besando! Aww!

Lamento si hay errores de ortografía!