Hola a todos! Pido disculpas por mis publicaciones tan alejadas en el tiempo. Intento retomar cuando puedo. Vuestros comentarios me animan a seguir. Gracias por leerme, espero ser más regular de ahora en adelante!

"Mogami san, te he llamado varias veces, me gustaría charlar contigo si es posible. He ido a la producción pero ya no estabas. Cuando escuches este mensaje, llámame, no importa la hora que sea"- Ese era el mensaje que había dejado Ren en el buzón.

-Chicos, realmente lo estoy pasando bien, pero he recibido una llamada y debo salir.- Comentó la joven Kyoko, un tanto afligida.

-Que pena! Hagamos esto de nuevo, es divertido!- Contestaron sus compañeros al unísono

-Sí! Muchas gracias a todos

-Te acompaño a la salida, Kyoko-chan- Kijima la acompañó hasta la salida, tenía curiosidad por la llamada y le divertía estar cerca de Kyoko.

-El de la llamada, era él? Ren? -Preguntó antes de atravesar la puerta de la salida.

-Sí..tenemos que hablar un asunto de un rodaje..- intentó disimular Kyoko, aunque se le daba realmente mal, cuando alguien nombraba a Ren, se sonrojaba en seguida.

-A mi no puedes engañarme! Con lo celoso que es, y lo enamorado que está, seguro que quiere interrogarte sobre lo de hoy jejeje! Me encanta ser el que pone un poco de pimienta en la herida.- Replicó, con ganas de jugar.

-Kijima san! eso no está bien! y... como sabes que está enamorado? Kyoko no se hacía a la idea que alguien pudiera saber sobre los sentimientos de Ren, sobretodo porque ella apenas se acababa de enterar, y todavía le parecía surrealista. Estaba completamente ruborizada.

-Lo se de hace tiempo, pequeña.. Aun recuerdo como se enfadó cuando te enviaba mensajes llamativos y tú me respondías, cuando ni siquiera te escribías con él. Acaso, aún no se te ha confesado? porque lleva meses frustrado! Eso sorprendió todavía más a Kyoko. de esos mensajes había pasado mucho tiempo, significa que en aquel entonces ya estaba enamorado de ella y ella lo había ignorado todo este tiempo? Como podía ser tan ciega? empezaba a sentirse realmente mal.

-Se me confesó hace pocos días, hasta entonces, la verdad es que no sabía nada..-dijo, apenada.

-Dios mio, debe de quererte mucho, conteniéndose de esa manera. Si fuera yo, ya te hubiera saltado a la yugular..- Intentó picar un poco más a la joven.

-EH? Conteniéndose? Todo este tiempo.. Tengo que irme! - dijo apresurada, y se fue.

" Como he podido ser tan tonta? Conteniéndose, hacia mi? todo este tiempo? y yo, huyendo constantemente...Necesito verle."se dijo decidida para si misma

Kyoko cogió un taxi y se dirigió hacia al apartamento de Ren, sin avisar. Decidida, llamó a la puerta de su casa. Ren abrió unos segundos más tarde.

-Mogami san? Que haces aquí? pasa algo?- preguntó Ren intrigado, un poco inquiento, al verla hiperventilar y nerviosa.

-He besado a Kijima san...- atinó a decir, balbuceando, intentando ordenar las palabras que había pensado en el taxi.

-Eh? Entra y .. Ren estaba consternado, confundido.

-No! He recibido besos de Kijima san, de Sho, de Cain Hell. Y tú siempre observando, desde la distancia, desde el silencio.. Y yo, no me daba cuenta de nada. Sabes lo peor de todo? Que todavía no he sido capaz de besar a la persona que quiero.. a ti.. sin roles, sin papeles, siendo yo misma. Kyoko estaba completamente avergonzada, mirando al suelo, con los puños cerrados, pero decidida a expresarse con sinceridad, sin tapujos.

-He oído bien? Acabas de decir que me quie..

-No me interrumpas!- exclamó Kyoko todavía en el umbral de la puerta, acelerada, con la mente totalmente embotada.- Esta tarde, he tenido una escena íntima con Kijima san, algo normalmente dificil para mi, sabes?. alzó la cara y le clavó la mirada. He tenido que subirme a horcajadas sobre él, y besarle, con insistencia, moderle los labios.. Y ha sido fácil porque no eras tú, porque no sentía nada. El solo hecho de pensar en ti hace que me paralice,- dijo, mirándose esta vez las manos, temblorosas- cuando yo en verdad desearía hacer esas mismas cosas contigo, tenerte.. solo para mi, y que calmes este cuerpo nervioso y encendido. Se ruborizó todavía más, no era exactamente lo que pretendía decir, pero es lo que salió inconscientemente de su cabeza.

-Oh, se soprendió Ren, la mandíbula estaba literalmente en el suelo. Se había imaginado una confesión de varias maneras, pero jamás de una manera tan pasional. Estaba excitado, sonrojado, caliente. Atrapó la mano de Kyoko y la empujó hacia dentro del apartamento. Cerró la puerta, la guió hasta el salón, sin decir nada, con prisa. Se sento en el sofá, la agarró por la cintura y la sentó encima suyo, reproduciendo la escena que ella había rodado ese mismo día. Con una voz ronca y desesperada, le susurró

-Bien, aquí me tienes, solo para ti - La tenía agarrada fuertemente por la cintura con ambas manos, fijándola bien sobre su pelvis, para que no pudiera escapar.

-Ah- Kyoko no podía dejar de mirar esos ojos llenos de lujuria, completamente sonrojada, sintiendo el calor emanando de sus cuerpos.

-Pidémelo Kyoko, pídeme que te bese- le susurró Ren, acercándose a uno de sus oídos, aprovechando para besarle el lóbulo, sintiendo la respiración acelerada de su chica.

-Mm.. Por favor.. Bésame- contestó Kyoko, con un leve quejido al sentir los labios de Ren en su oreja.

-No.. no voy a besarte- respondió Ren, sepárandose un poco para mirarle a los ojos, liberando su cintura para sostener firmemente su cara con ambas manos - voy a devorarte..-

Y en un gesto rápido, atrapó su boca, con besos fuertes acelerados, sosteniendo su cara con fuerza para penetrar en su boca lo más profundo posible. Kyoko gemía ante tanto descontrol, no se imaginaba que un beso con su amado pudiera superar de esa manera los besos dados en la ficción. Ren no podía parar, seguía reteniéndola, lamiendo su boca, introduciendo su lengua, mordisqueando sus labios. Bajó una mano hasta la mitad de su espalda, guiándola para arquearla, para poder besar su cuello, morderlo, y llegar hasta debajó de su clavícula, para hacerle un chupetón. Kyoko gimió más fuerte. Ren levantó la mirada, y vió como estaba tan roja que echaba humo por la cabeza y estaba casi inconsciente. Sonrió levemente, la abrazó, y le dijo.

-Espero que eso haya calmado un poco tu deseo

-Ha sido... no lo sé. Y el tuyo?

-Todo lo contrario, lo ha aumentado más- susurró Ren, todavía abrazándola.

-Gracias por tener tanta paciencia conmigo, Ren. Se que no debe ser fácil- dijó, aferrándose más a sus brazos para ocultar el sonrojo.

-Ren...Esperaba que un día me llamaras así...Vamos, te acompañaré a casa, estar aquí es peligroso para ambos.

-Ok, pero el mensaje decía que querías hablar de algo - Preguntó la joven, todavía sentada encima suyo, separándose del abrazo para volver a mirarle.

-Oh, tranquila, ya has respondido hoy a todas mis dudas- sonrió satisfecho. Siento que te estás esforzando, y estamos más cerca el uno del otro. Me tienes completamente a tu merced, Kyoko Mogami.

-Siento lo mismo, Ren Tsuruga-

-Aunque mi desdeo de poseerte crece más y más, y no quiero asustarte.

Kyoko se acercó una vez más y le besó suavemente en los labios.- Me asustaré, pero confío en que tú sabras dominar mis miedos- dijo, sonriente

-Kyoko, mi verdadero yo es mucho más salvaje, no deberíamos confiar tanto en mi autocontrol...- le dijo, con su mirada salvaje, de Kuon, esa mirada de fuego, que ella ya había podido ver en alguna que otra ocasión.

-Me gustaría saber, quién eres de verdad..- Y te he pedido que me beses.. entonces..

-Dejame aprovechar un tiempo más así, antes de contártelo todo.. por favor..Dejame disfrutar más de ti..-respondió Ren, un tanto apenado

-Está bien, cuando tú quieras..

Ren acompañó a Kyoko al Daruymaya, se abrazaron una vez más en el coche, y quedaron en verse lo antes posible, cuando las agendas estuvieran un poco más vacías.